En este post vamos a explicar en qué consiste la hipoteca inversa y el proceso de herencia, cual es el proceso para los herederos una vez fallece el titular de la vivienda hipotecada
¿Qué es una hipoteca inversa?
La hipoteca inversa es un tipo de préstamo hipotecario en el que se ofrece la vivienda como garantía. Está focalizado para personas de 65 años o más que poseen una vivienda en propiedad y requieren ingresos adicionales durante su jubilación.
Diferencias
Una de las principales diferencias de la hipoteca inversa con una hipoteca normal es que la persona mayor no tiene que devolver las cantidades recibidas ni los intereses, sino que serán los herederos quienes se harán cargo de repagar la deuda una vez fallezca el hipotecante.
De esta manera, la persona interesada recibirá un dinero y a la vez podrá disfrutar de su vivienda ya que permanecerá siendo el pleno titular de ella.
La cantidad de dinero que la persona recibirá depende de tres factores:
-El valor de la vivienda.
-La edad de la persona (y su cónyuge en caso de que entre en la operación).
-La manera en la que quieran recibir el dinero. Si es un único desembolso inicial, pagos mensuales o una combinación de ambos.
El problema radica en que el dinero que se recibe con una hipoteca inversa es como máximo un 40-50% del valor de mercado. Se debe a que si la persona que adquiere la hipoteca vive más de lo estimado por el banco que la otorga, el valor de la deuda puede superar el valor de la vivienda.
Por ese motivo, para poder cubrir el riesgo de longevidad, las entidades financieras ofrecen un préstamo muy por debajo del valor de la vivienda.
Los intereses de una hipoteca inversa, son más altos que los de una hipoteca normal, y además se capitalizan. Eso quiere decir que todo interés acumulado será incluido como parte de la deuda a la hora de calcular el nuevo interés de ese mes.
Este tipo de interés puede formar un efecto de “bola de nieve” ya que cuanto más dinero se recibe y más tiempo dura, más rápido va creciendo la deuda de forma exponencial.
Existen otras alternativas en el mercado como la Vivienda Inversa en la que se recibe una cantidad superior de dinero y, a cambio, la persona traspasa la titularidad de la vivienda.
¿Qué ocurre una vez que fallece la persona o su cónyuge?
Primero, se abre el testamento y los herederos son informados de que van a heredar la vivienda, incluyendo otras partes de la herencia que les corresponda.
El segundo paso recomendable antes de aceptar la herencia, es comprobar si hay alguna carga sobre la vivienda, para ello hay que pedir la nota simple de la vivienda en el Registro de la Propiedad. En el caso de que exista una hipoteca inversa nos aparecerá una anotación en este documento.
Una vez identificada la deuda, habrá que contactar con la entidad financiera y pedirles un certificado de deuda en el cual se expliquen las condiciones de la deuda y la cantidad exacta que se debe de pagar para cancelarla.
Con toda esta información los herederos pueden tomar principalmente las siguientes decisiones:
- Renunciar a la herencia.
- Aceptar la herencia:
- Cancelar la deuda y quedarse con el inmueble en propiedad.
- Vender la casa y con el importe obtenido cancelar la deuda y quedarse con el potencial importe sobrante.
Normalmente los herederos tendrán 12 meses para devolver el dinero de la hipoteca más sus intereses acumulados
En la inmensa mayoría de los casos, los herederos se decantan por la opción de aceptar la herencia y vender la casa. Lo cuál resulta paradójico ya que uno de los principales motivos por lo que las personas mayores contratan este producto es para mantener la vivienda dentro del patrimonio familiar.
Vivienda Inversa es la alternativa más favorable para recibir el máximo rendimiento por la vivienda y seguir viviendo en ella.
La única diferencia es que con Vivienda Inversa, al vender el pleno dominio desde el primer día, los herederos no se tendrán que preocupar de tomar una decisión sobre la vivienda una vez fallezca la persona mayor.
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